En Kyrya Group contamos con un gran equipo humano, formado por mujeres y hombres de edades muy variadas, desde los 25 hasta los 63 años.
Aprovechando el Día de la Mujer, queremos ensalzar el gran talento femenino del que la organización dispone. Tenemos la suerte de convivir en nuestro día a día con mujeres fuertes y con gran capacidad de trabajo y de las que estamos tremendamente orgullosos y disfrutamos, además, de la experiencia vital de mezclar varias generaciones, que es muy enriquecedor para todos.
Claudia, Diana y Cristina: ejemplo de mujeres profesionales y luchadoras
De entre todas las mujeres que forman parte de Kyrya Group, hemos querido poner en valor a tres personas muy importantes. Claudia Boboc, Diana del Castillo y Cristina Catalá.
Claudia y Diana son las mujeres más jóvenes de nuestra organización. Claudia trabaja en producción y enfrenta su día a día en un departamento que está muy masculinizado, pero ella está integrada con sus compañeros. Además, ha comenzado a prepararse para ser programadora, un esfuerzo que esperamos ver plenamente recompensado entre nuestras filas, en unos años.
Diana del Castillo es nuestra programadora Junior más joven, ha llegado hace poquito a nuestro equipo pero ya estamos orgullosos del aporte de valor que nos ha traído. Como todos sabemos, hoy en día la digitalización es una parte importante en todos los sectores y tener una programadora que además se interese por la industria, es un valor añadido. Por eso, apostamos por su incorporación, formación y crecimiento junto a nosotros.
Por último, nuestra mujer más Senior es Cristina Catalá, responsable de compras. Le avalan más de 40 años de experiencia, sus referentes son el tesón y el trabajo bien hecho, y es toda una suerte contar con personas como ella en nuestra organización.
Hemos querido realizarles una pequeña entrevista en cuyas respuestas podemos apreciar las diferentes experiencias marcadas por la experiencia y las vivencias profesionales que las tres han tenido, marcadas por los importantes cambios a los que las mujeres nos hemos enfrentado y, sobre todo, por los cambios generacionales que afectan por igual a ambos sexos.
Cristina Catalá
El ser mayor no me supone un problema, al contrario, saber que puedo aprender igual que una persona más joven me motiva.
Nunca me ha faltado el trabajo, comencé mi carrera profesional con 14 años, no concibo estar parada y por ello nunca lo he hecho.
He trabajado en contabilidad, logística, como secretaria de dirección, en pedidos y ahora en compras, nunca se me ha tratado diferente por ser mujer.
Entiendo que he tenido suerte, pues no siempre ha sido fácil para todas, si bien es cierto que hace años sufrí acoso sexual en el trabajo. En aquella época no estaba tan perseguido como ahora, no teníamos tanta información y, por tanto, opté por despedirme.
Actualmente estoy segura de que lo hubiese podido denunciar. Kyrya cuenta además con diferentes vías para ello, donde podemos sentirnos cómodas para trasladar cualquier situación que nos haga sentir mal.
Nunca he tenido problemas para conciliar mi vida personal y familiar, pero soy consciente de que no ha sido siempre así para todas las mujeres. En mi caso ha sido suerte, porque ahora, es mucho más fácil que años atrás. Y, aquí, tenemos muchas facilidades para conciliar.
Dentro de 5 años me veo tal cual estoy ahora, pero visualizando más cerca mi jubilación y dentro de 10 espero estar jubilada disfrutando en mi casa de la playa. Yo creo que después de más de 50 años cotizados me lo habré ganado, seguro que echaré de menos a mis compañeros, pues tengo aquí un equipo que ya es casi familia y espero que siga contando conmigo para tomar una cerveza.
Diana del Castillo
Llevo 9 meses trabajando en Kyrya y tengo 25 años.
Estoy acostumbrada a trabajar rodeada de hombres. Mi primera experiencia laboral fue en C.A.F y, en mi departamento, todos eran hombres, después estuve en Pikolin y allí sí tuve una compañera.
Tengo la suerte de poder decir que en todas las empresas en las que he trabajado me he sentido cómoda como mujer y como profesional, así que no puedo valorar si esto está cambiando, yo siempre me he sentido una más.
Actualmente en Kyrya vuelvo a ser la más joven y la única mujer en mi departamento.
Somos poquitos pero estamos creciendo, me siento arropada, trabajo en un ambiente distendido, cada día nos echamos unas risas y bromeamos además de trabajar para sacar adelante los proyectos y, cuando terminamos alguno importante, solemos irnos a comer para celebrarlo.
Por suerte, nunca he sufrido ningún problema en mi trabajo por ser mujer, pero si llegase el día estoy tranquila por que sé que hay medios para poder tratarlo.
Dentro de 5 años me veo independizada con mi mascota (seguramente sume alguna más), practicando Kenpo y trabajando en Kyrya, dentro de 10 años, sinceramente no lo sé, no soy capaz de visualizarme ni a nivel personal ni profesional, estoy deseando ver qué viene.
Claudia Boboc
Cuando estás en el inicio de tu vida profesional, siempre surge el miedo de que ser joven pueda afectar al trato con los compañeros de trabajo.
Sobre todo, cuando acabas de entrar en un departamento donde los compañeros llevan mucho más tiempo y, por ello, tienen más experiencia.
Pero he tenido la suerte de que, desde el primer momento, todos, me han acogido como a una más del equipo, lo que ha hecho que mi incorporación y mi día a día haya sido mucho más sencilla y cómoda.
No he llegado a vivir nunca ningún trato diferente por ser mujer y, por suerte, ninguno que sobrepase los límites de lo profesional. De todas formas, aquí la línea con la dirección de la empresa es muy corta, así que creo que me sentiría con total libertad para poder comunicarlo si sucediese.
He comenzado a formarme para el desarrollo de aplicaciones multiplataforma, algo que nada tiene que ver con mi actual trabajo, y tengo mucha ilusión de que una vez finalizada la formación, pueda ponerla en práctica aquí y aprender del gran equipo que tienen en IT.
Compaginar trabajo y estudios no está siendo tan complicado como me había imaginado, desde Kyrya me han incentivado mucho para emprender esta formación y han sido muy flexibles para que la conciliación no sea un problema, espero avanzar y que esto sea una ventaja para mi puesto. Tanto dentro de 5 como de 10 años me veo trabajando aquí aportando mi granito de arena, creo que tengo muchas opciones para poder crecer dentro de la organización.
Nos sentimos orgullosos de contar con ellas en nuestro equipo
Después de estas tres entrevistas, desde Kyrya Group podemos sentirnos orgullosos porque ellas son tal cual lo han expresado: mujeres y profesionales que luchan por sus intereses y que pueden decir que ven recompensado cada día ese esfuerzo. Desde aquí, sólo podemos continuar trabajando para que todo continúe de esta forma y para que nunca haya distinción entre mujeres y hombres en ningún sentido. Hoy en día, todos debemos tener claro que somos personas y desde las organizaciones, debemos medir a nuestros equipos por su trabajo. Esto es lo único que debe generar distinciones.
